miércoles, 7 de junio de 2017

SOLO SER TÚ


Imaginaros por un momento que vuestros actos no tuviesen consecuencias. No me refiero a realizar actos fuera de la ley. Creo que si, a cualquier persona le dieran una especie de superpoder por el cual hiciera lo que le viniera en gana, sin consecuencias, probablemente acabaría haciendo mil cosas ilegales, violentas y sexuales. Un ser humano sin normas, se transforma en un ser entregado a sus instintos.

Me refiero a que, dentro de la ley, nadie juzgara tus actos. Es decir, que no existiera la decepción, la vergüenza, la envidia, los estereotipos o las convenciones sociales. Que, mientras no dañes a nadie, no juzgaran tu forma de vestir, de comportarte, con quien te acuestas o a que dedicas tu tiempo. Que no dedicásemos el tiempo a criticar a los demás. Que no nos sintiésemos ofendidos porque nos pregunten algo, sea del tema que sea. Que diera igual que fuésemos altos o bajos, gordos o flacos, tontos o listos. Que no tratásemos de imponer a los demás nuestras ideas políticas o religiosas. Que no nos odiásemos por ser distintos. Que, simplemente, cada uno hiciésemos nuestro camino. Sin imposiciones familiares, sin convencionalismos, sin ser juzgados, sin ser criticados y sin presión.

Solo ser tú.

Tu verdadero tú.

Sería bonito, ¿verdad?

No hay comentarios :

Publicar un comentario