El concepto de familia está cambiando y ha cambiado exponencialmente en los últimos cuarenta años. Cuando yo era niño, prácticamente solo existía un modelo familiar aceptado: Pareja casada por la iglesia con hijos. El solo hecho de no tener hijos ya era un problema, ya que, el objetivo católico de formar un hogar, era tener descendencia.
Ya se había aprobado el divorcio, pero aquellas parejas que se divorciaban no estaban bien vistas, sobre todo las mujeres, que quedaban estigmatizadas.
Ahora existen hogares monoparentales con hijos, homosexuales con hijos, parejas sin hijos, gente que vive sola…multitud de opciones aceptadas socialmente, aunque aún existe un residuo que sigue provocando un cierto reparo a elegir una opción no tradicional.
Yo conozco gente que vive sola y que sigue obsesionada con la búsqueda de pareja. Les aterra un poco la idea de estar solo en la vejez. Este miedo es una soberana estupidez. Hay multitud de parejas mayores que ya ni si quiera se hacen compañía. Además, hay algo más terrible que estar solo, y es estar con alguien que te haga sentir solo. Y de esas parejas hay muchas.
Tener pareja y tener hijos significa ceder parte de tu libertad. Dejar de ser dueño de tu vida y donarla a otras personas. Y Vivir, solo se vive una vez. No hay segunda oportunidad.
Elige tu idea de familia en libertad y se consecuente con aquello que eliges porque toda opción tendrá cosas buenas, pero tambien malas.
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